martes, 1 de julio de 2008

La caída de la alegría

Ando últimamente muy luctuoso pero ¿qué es el amor ícaro sino aquello que cae en su plena belleza, lo que está destinado a caer porque así es el Tiempo, porque sí?
Ruslana Khorsunova era un ángel sin alas de 20 años de edad, de nacionalidad Kazako-rusa que se ha despeñado por causas aún desconocidas desde un apartamento de Manhattan antes de ayer, 29 de junio, a las 18:30 de la tarde.
Parecería el argumento de una apasionante (o no tan apasionante) novela de misterio esotérico, pero lo cierto es que la vida, con sus sonoros silencios nos da lecciones que no se acaban de comprender del todo a menos que uno se precipite en una soturna melancolía, y sin alegría ¿de qué vale comprender?
Puede que Ruslana siga siendo un ángel (ahora sí) más allá de las fotografías que acaso contribuyeron a acabar con ella.

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